miércoles, 27 de marzo de 2013

LIII

Hasta ayer,todo era claro
todo era simple y natural
todo sencillo,inamovible
solo sangre hasta la eternidad;
Yo,era dueño de sus vidas
su miedo en la oscuridad
su terror en sus sueños
de sus sombras creador;
Hasta ayer,
Cuando su ahogado llanto
en la lejanía oí
en lo profundo del bosque
 su frágil figura descubrí;
Entonces fue el instante
que algo en mi renació
el calor por siglos olvidado
el recuerdo del amor.
No es mi derecho
el volver amar?
no es mi privilegio
ofrecerle la eternidad?
Tarha.

1 comentario:

Willow dijo...

Hermosos versos para tan bella historia.